hacia Almería. Cap. 1

Me encuentro frente a otro reto personal. Puede parecer, que con 70 rutas publicadas en este blog, esta situación ya se haya podido dar con anterioridad. Pero no, nunca antes me había embarcado en un viaje en solitario de más de un día. En esta ocasión serán sólo dos noches, pero puede marcar un punto de inflexión en mi percepción ante posibles futuros viajes de mucha más envergadura.

El destino elegido será la provincia de Almería, concretamente un pueblo inmerso en la alpujarra almeriense. Láujar de Andaráx. El alojamiento, para una primera vez, lo llevo cerrado.

Nos situamos en la semana previa a semana santa, concretamente en el miércoles día 25 de Marzo. Aunque ahora haga un sol casi veraniego, ha estado lloviendo de manera casi bíblica en la zona mediterránea hasta prácticamente hoy. Esto que puede parecer intrascendente, condicionará parte del viaje como veréis.

En primer lugar por la hora de salida. La tía el tiempo decía que conforme fuera avanzando el día, se abrirían claros en mi destino dando paso a días estupendísimos. Me voy a la cama con la noticia de que el puerto de la Ragua, por el que tengo que atravesar el P.N. de Sierra Nevada, está cerrado por nieve acumulada. Por estos motivos, decido tomarme el desayuno con tranquilidad para "ganar" tiempo. En Ciudad Real, a las 10 cuando salgo del garaje hace un sol radiante, aunque con algo de frío.

Las A-4 desde Almuradiel y A-44 desde Bailén son testigos de mi lento pero seguro transitar. A la altura de Jaén comienza a hacerse mas ostensible la presencia de amenazadoras nubes.
Quien haya conducido por la A-44 sabrá que pasando Jaén, la autovía inicia un prolongado descenso atravesando en su parte final, un pequeño desfiladero. Éste termina en dos minúsculos túneles excavados en la roca. A la salida del último de estos, se encuentra la salida que debo tomar, valga la rebuznancia. Concretamente la 59.

D N CRIS
PINO
NOB. CAES.
-A NUESTRO SEÑOR CRISPINO NOBILISIMO CESAR-

IMP. CAES. DIVI
tralaNI parTHICI f. DIVI
nERVAE NEP. TRAIANVS
HADriaNVS AVG. PONT.
maX triB. POT.XX
COS. Iii P.P. RESTITVIT
-EL EMPERADOR CESAR TRAJANO HADRIANO AUGUSTO HIJO DEL DIVINO TRAJANO PARTICO NIETO DEL DIVINO NERVA PONTÍFICE MÁXIMO CON POTESTAD TRIBUNICIA AÑO XX CONSUL AÑO III PADRE DE LA PATRIA RESTAURÓ (ESTA VIA)-

Aún no encuentro el motivo ni el sentido de porqué lo hice. La ruta que tenía en el papel no iba por ahí, de hecho, era andar hacia atrás. Pero decidí conscientemente meterme y desandar un trecho por la antigua nacional N-323 hacia Jaén.

IMP. CAESAR AVGVSTVS
DIVI F. COS. XI
TRIBVNICIA POTESTATE XVI
IMP. XIII PONTVFEX MAX.
-EL EMPERADOR CÉSAR AUGUSTO HIJO DEL DIVINO CÉSAR CÓNSUL AÑO XI CON POTESTAD TRIBUNICIA AÑO XVI IMPERATOR AÑO XIII. PONTÍFICE MÁXIMO-

Necesitaba parar a descansar. Podría haber continuado con el itinerario previsto y buscar un sitio idóneo dentro de la ruta; Incluso parar en el área de servicio de dicha salida. Fuera como fuese, este hecho fortuito me llevó a descubrir a pie de carretera el Centro de interpretación de la Caminería en La Cerradura.

Este centro de interpretación es una especie de museo al aire libre (y free) en el que se realiza un paseo por la historia de las carreteras, indicando mediante una colección de hitos camineros, originales y reproducciones, las diferentes formas de orientar e informar al viajero, que ha circulado desde los orígenes, hasta la actualidad por todo tipo de caminos.

Tras una rápida búsqueda por la red, creo que os estoy mostrando esto en primicia mundial. Os podréis quejar...

El original se encuentra en la margen derecha de la carretera de Granada a su entrada en Jaén.
A partir de 1856 comienza a introducirse el sistema métrico decimal en la red de carreteras españolas desplazando a los hitos de distancia en leguas o leguarios.

En este enlace obtendréis más información.

Dada cuenta de medio paquete de galletas, y casi otra media tarjeta de memoria en fotos continúo esta vez sí, con la ruta prevista.

En el cruce de la discordia, tomo la A-324 que me introducirá en la Sierra Mágina. Paro a dar una vuelta en el pintoresco Cambil.

Casi da pena que se acabe, a la altura de Huelma, este tramo pero el espectáculo debe continuar. Me dirijo a Guadix, en la que tengo pensado hacer parada y fonda.

Son las dos menos cinco cuando aparco la moto en la Plaza de la Constitución. Salgo corriendo a ver si llego antes de que cierren la oficina de turismo. Sé que esta población tiene mucho que mostrar, pero no tengo ni idea de el qué.

Con un mapa en una mano y la cámara en la otra, solo me faltaban las chanclas con calcetines para tener el atuendo turístico básico. Me dispongo a pasear por las calles del casco histórico de Guadix.

La catedral, iniciada en 1492 sobre una mezquita árabe. Su erección (como dicen los cachondos en su web) se dilató más de tres siglos hasta su finalización en el s. XVIII conjugando los estilos gótico, renacentista y barroco.
Debido a la hora que es, está cerrada, pero me hubiera gustado visitar su interior.

Principalmente por ver La Piedad de dicha catedral, así como me hubiera gustado escuchar, -ya puestos a pedir...- a la coral. Si tienen una escultura, supongo que será porque lo hacen bastante bien. El colega de atrás a la derecha está sembrado...

Es todo un placer pasear por estas calles mientras por momentos nieva, por momentos chispea. -nótese la ironía-. En esta foto incluso se aprecian los copos de la nevada.

Me adentro por las callejuelas a ver si encuentro un poco de resguardo del viento

y de paso buscar algún sitio para comer

pero con las manos heladas, pocas ganas de visita me están quedando.

Apenas me vienen ideas de cómo fotografiar lo que veo de una manera un poco agradable.

Y es una lástima, porque con la cantidad de detalles que veo, este ánimo me hace sospechar que me estoy perdiendo la mitad.

Después de comer, a pie de moto, antes de cogerla para acercarme a la zona de las cuevas, llamo a la recepción del hotel para comunicarle, tal y como indica la reserva, llegaré mas tarde de las 6. Durante la conversación me indica una posible vía en caso de que el Puerto de La Ragua siga cerrado.

Me pongo en camino enseguida… Ya fuera de Guadix me percato de que ¡no he visitado las cuevas! Jooodeer, ya no doy la vuelta. De todas formas tendré que volver. Vaya cabecita… Al menos hice esta entre los tejados de una calle. Para la muestra puede servir.

En un primer momento, mi intención era, para no repetir carretera, cruzar a toda costa La Ragua pero conforme me voy acercando al desvío, cada vez lo veo peor.

Al final, lo más razonable para evitar un mal innecesario es ser obediente a la recepcionista... Al menos me aparto de la A-92 para una fotillo rápida del castillo de La Calahorra.

Durante el trayecto por autovía hasta Abla, me vuelve a lloviznar aguanieve. Nada comparado con la que voy evitando. La suerte al fin y al cabo no me está siendo esquiva.

Cruzaré la sierra por la AL-3404, también conocido como puerto de Santillana. En su cara norte es algo anodino, pero muy, muy interesante en su cara sur. Menudo descubrimiento. Las nubes de tormenta han desaparecido, pero en su lugar, debo luchar contra otro enemigo aún más poderoso y peligroso.

Un fuerte viento enrachado me las hace pasar verdaderamente putas. En algún momento temo incluso por mi integridad. Los planes que tenía para la tarde se van al garete de un plumazo.

Ya me jode venir a Almería, tan cerca de un sitio que se llama desierto y que se ponga a llover.

Una vez en el hotel, ya con el checking pasado y la moto a cubierto. Se desata la madre de todas las tormentas.

Espero que se gaste todo el mal tiempo en esta noche de perros. Me tiene contento el de la previsión.

Hasta mañana.